Cómo ahorré mis primeros 720 euros con la ducha de los 2 euros

Hace unos años se puso de moda este método de ahorro que consistía en guardar las monedas de dos euros, (pudiendo ser la equivalencia de un café, una cerveza, etc.) para ahorrar sin demasiado esfuerzo una cantidad sustancial de dinero.

Esta modalidad de ahorro venía con buenas intenciones pero asociada a una buena excusa: no encuentro monedas de dos euros y por eso no puedo llenar la hucha. Tal excusa, quizá la pudimos tener todos, y yo hice lo propio para conseguir mi objetivo; y en mi caso lo solucioné con una cuadrícula que equivalía a los días del mes y la aportación podía venir dada ya fuera por una monedas o billetes, lo importante era el resultado.

Nada mal, 720 euros que a uno le pueden venir bien para cualquier cosa. Ahora mismo no recuerdo en qué los empleé, pero sé que fueron el principio de algo muchísimo más grande, que contaré en los próximos capítulos.